DE CONTAMINACIÓN ELECTROMAGNÉTICA

La ciudad de Santa Cruz cuenta con la instalación de centenares de Torres y Antenas para telefonía, televisión, radio y otras señales de telecomunicación, todas las cuales generan radiación electromagnética.
Hasta el momento no se tiene en cuenta el daño que produce la presencia de estas , sobre las actividades diarias, niveles nocivos de exposición a la radiación electromagnética al que están expuestas las personas, ante la proliferación de antenas y aparatos electrodomésticos que emiten este tipo de radiación.
En muchos países está prohibido instalar antenas de celulares a menos de 300 metros de la población ya que aún no se conocen sus efectos contra la salud. Sin embargo en nuestra ciudad tenemos en mas de cada uno de los puntos cardinales, de varias empresa de telecomunicaciones, internet y otros.
Las antenas de celulares emiten radiaciones no ionizantes. Muchas investigaciones científicas han establecido que la población (humana y animal) expuesta de forma continua a microondas, en un radio menor a los 300 metros, experimentan un incremento de abortos, cambios en la actividad eléctrica del cerebro y en la presión sanguínea, depresiones, insomnio, dolores de cabeza, fatiga y otras afecciones neurológicas. Sin embargo, aún no existe ningún estudio internacional que descarte o confirme estas pruebas. De todas maneras, como medida precautoria a la espera del resultado de estos estudios, la Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere no superar cierto límite de emisión de estas radiaciones. En ese sentido, países como Suiza, Italia, Suecia, Australia, Rusia y China no permiten la instalación de antenas a menos de 300 metros de viviendas
Existen limitaciones para las casi mil antenas que se concentran en medio de viviendas, colegios y cualquier lugar que elijan las empresas de celulares para cubrir la demanda creciente que, en el país, ya supera las 20 millones de líneas.

Las empresas deberían utilizar el satélite pero, claro, levantar antenas cada 20 cuadras pagándole a consorcios mil o dos mil pesos para que les permitan usar sus terrazas es mucho más barato.”.Una combinación de desinformación generalizada y de intereses creados hace que en Bolivia y principalemente en Santa Cruz de la Sierra a diferencia de los países más desarrollados, casi no se hable de los riesgos a la salud provocados por estas antenas. Pero ese casi no involucra a todos.
Síntomas
Mareos, vértigo, zumbidos, hipertensión sanguínea, insomnio, palpitaciones, dolor de cabeza, calentamiento de los tejidos cercanos al oído y la córnea, síndrome de fatiga crónica, afección del sistema inmunológico. Esos son sólo algunos de los síntomas que sufren los vecinos que viven cerca de alguna antena de celular. Según investigaciones realizadas en otros países del mundo, también se han detectado enfermedades de mayor gravedad como cáncer y leucemia infantil. Por este motivo la OMS inició el Proyecto CEM que estudia los efectos de los campos electromagnéticos sobre los seres humanos. Mientras tanto insiste en las medidas precautorias: ninguna antena a menos de 500 metros de lugares habitados

La Organización Mundial de la Salud recomienda lo siguiente:
1.- El cumplimiento estricto de las normas vigentes de seguridad nacionales e internacionales: esas normas, basadas en los conocimientos disponibles, se han elaborado para proteger a toda la población: usuarios de teléfonos móviles, personas que trabajan o viven cerca de estaciones de base, y quienes no utilizan ese tipo de teléfonos.
2.- Interferencias provocadas por los CEM: los teléfonos móviles, al igual que otros
aparatos electrónicos de uso común, pueden causar interferencias electromagnéticas en equipos eléctricos. En consecuencia, deben tomarse precauciones cuando se utilicen teléfonos móviles en las proximidades de los sensibles equipos electromédicos utilizados en las unidades de cuidados intensivos de los hospitales. En algunos casos, los teléfonos móviles pueden interferir con sistemas aéreos de navegación, y con ciertos dispositivos médicos, como marcapasos y audífonos. Las personas que utilicen
tales dispositivos deben consultar a su médico para determinar su susceptibilidad a esas interferencias.
3.- Medidas sencillas de protección: vallas o barreras en torno a los emplazamientos de antenas pueden contribuir a evitar el acceso no autorizado a zonas donde quizá se
excedan los límites fijados.
4.- Consultas con las autoridades locales y el público para la ubicación de estaciones
base: como es lógico, el emplazamiento de la estación de base de un teléfono móvil ha de ofrecer buena cobertura para la señal y accesibilidad para el mantenimiento. Si bien ,los niveles del campo de radiofrecuencia en torno a las estaciones de base no se consideran un riesgo para la salud, las decisiones sobre su emplazamiento deben tener en cuenta la estética y la sensibilidad del público. Ubicar, por ejemplo, estaciones de base cerca de jardines infantiles, escuelas y parques infantiles puede requerir una consideración especial. La libre comunicación y el debate entre el operador de telefonía móvil y el público durante el período de planificación para una nueva antena pueden ayudar a crear una mayor comprensión pública y a que se acepten mejor las nuevas instalaciones.
5.- Un eficaz sistema de información sanitaria y de comunicación entre científicos,
gobiernos, la industria y el público puede ayudar a ampliar el conocimiento general
sobre la tecnología de los teléfonos móviles y a reducir desconfianzas y miedos, tanto reales como imaginarios.

Está en vigencia la Ordenanza Municipal N° 039/2001 y su “Reglamento para la Implementación y Funcionamiento de Torres y Antenas” en el cual se establecen las políticas y procedimientos que se deben aplicar para su implementación y cumplimiento.

El Gobierno Municipal no cuenta con un registro de las Torres y Antenas que utilizan el espacio aéreo de nuestra jurisdicción, como producto de la ausencia de un adecuado sistema de información actualizado que permita la posterior realización de seguimiento y control planificado.

Esta deficiencia hace que se generen altos niveles de contaminación electromagnética poniendo en peligro la salud de la población, así como también la seguridad de las viviendas circundantes a estas instalaciones.

publicado por :

Marco Siñaniz Vargas 749-8

ing.Ambiental